04. octubre. 2020. El presidente del Partido Popular de Toledo y senador, José Julián Gregorio, ha reclamado a Page dejar su campaña “presidencialista” de “plató en plató a nivel nacional” para suceder a Pedro Sánchez y centrarse en trabajar en la salud de los castellano-manchegos, por lo que ha exigido al jefe del Ejecutivo regional la apertura “inmediata” del nuevo Hospital Universitario de Toledo.
Así lo ha señalado Gregorio este domingo, en declaraciones a los medios junto al nuevo Hospital Universitario de Toledo, acompañado por los parlamentarios nacionales por la provincia de Toledo, Vicente Tirado, Carmen Riolobos y Pilar Alía.
El senador del PP ha recordado que Castilla-La Mancha cuenta con una de las tasas de letalidad más altas de España, con 410 fallecidos por cada 100.000 habitantes, lo que supone 131 muertes más que la media nacional. En concreto, en la provincia los fallecidos por COVID-19, de manera oficial, han alcanzado las 901 personas.
Gregorio ha incidido en que esta situación se agravará en los próximos meses cuando la gripe y otras enfermedades “se junten” con la COVID-19, por lo que se ha preguntado “que vamos a hacer en esta provincia” para proteger a los ciudadanos. Por ello, ha insistido en que la solución “es sencilla”, y es abrir este nuevo centro hospitalario.
“¿Cuándo va a abrir Page el nuevo hospital para que todos los castellano-manchegos puedan beneficiarse?”, ha cuestionado. “¿Cuando ya sea tarde, cuando sigan miles de contagiados, cuando los fallecidos lleguen a más del millar, entonces lo va a abrir?
Así, ha dicho que “no queremos que Page siga de plató en plató a nivel nacional, queremos que trabaje y luche por los castellano-manchegos” y si no lo hace “que se retire” y comience “la carrera presidencial por el Gobierno de España contra Pedro Sánchez”. “Los castellano-manchegos necesitamos un presidente serio” y no a alguien que “se mete con profesores, mayores, médicos y ciudadanos”, ha dicho.
Gregorio ha señalado que la provincia de Toledo está “colapsada”, con consultorios médicos cerrados por falta de personal, incluso centros médicos como el de Talavera de la Reina, así como el colapso de las líneas telefónicas “porque no se contrata gente” o la falta de rastreadores.